martes, 23 de noviembre de 2010

domingo, 21 de noviembre de 2010


Boys Be, el amor juvenil

En el 2000, Hal Film realizo la serie que desarrollaba el guion de Itabashi, aunque fue necesario adaptar la historia, pues trece episodios hubieran sido insuficientes para plantear todas las peripecias de Kyoichi (protagonista y mártir del sentimiento del amor) y sus amigos, que de alguna forma reflejaban la experiencia misma del lector.
Ahora vamos con una pequeña sinopsis de lo que encontrarán en este entretenido y sentimental anime; Kyoichi y Chiharu (la manzana de la discordia) se conocen desde niños, así que han crecido juntos y han compartido el mismo salón de clases, sin embargo a partir de la secundaria la amistad entre ellos comienza a cambiar, ahora Kyoichi habla con ella esporádicamente, pero se ve obligado a hacerlo, aunque por la situación no puede evitar el nerviosismo. Dado que se aleja irremediablemente de ella, siempre se mantienen al margen y procura no decir mucho acerca de si mismo, aunque ella sepa exactamente quien es.
Por alguna extraña razón Kyoichi sigue pensando en Chiharu. Ya en su casa revisa su álbum de fotos, parece que nada ha cambiado, únicamente que cuando eran niños se tomaban de la mano y ahora ya no lo hacen, de pronto Chiharu entra a su habitación sin avisar y le pregunta por su cuadro, el apenas balbucea una respuesta, luego le pide que le preste un CD, Kyoichi trata de disimular que la está mirando y le responde como si no supiera de que esta hablando.
Su respiración se entrecorta mientras que su corazón se acelera, algo anda mal y no logra entender cual es la razón. Y de pronto descubre que le atrae su amiga, la misma con la que creció y ahora tiene un lindo cuerpo, ese mismo que tanto le gusta mirar cuando ella entrena.
Si se vieron reflejados en algún personaje o recodaron la primera vez que dijeron “ME GUSTAS” o “TE QUIERO” a esa persona tan especial, entonces sean bienvenidos a Boys Be.
La serie principalmente consta de 12 episodios que como digo antes, es muy corta y en momentos te frustra por querer saber más; además de tener un OVA como treceavo capitulo que no es un verdadero final ya que te deja con más dudas y con ganas de seguir viendo amoríos juveniles.
En lo personal esta serie de anime me agradó bastante y me vi reflejado en algunos personajes; y me puse a pensar cuando le dije sinceramente a aquella persona que me gustaba y me rechazó. La vida sigue y para eso está mi remedio favorito, el anime, los videojuegos y el comic.

Anime en la pantalla grande

Hellsing, Gantz, Fullmetal Alchemist, Naruto, Saint Seiya, Dragon Ball Z, Prince of Tennis, Astroboy, Trigun, Gungrave… el listado de series de anime que hemos tenido oportunidad de ver por TV ha sobrepasado con creces todos nuestros sueños (aunque sea TV de paga). Ha quedado demostrado que el anime no es un entretenimiento para unos pocos, que un canal dedicado pura y exclusivamente a la animación japonesa, revistas especializadas, hostings dedicados, no es un delirio. El anime mueve multitudes.
Entonces… ¿Por qué seguimos sufriendo escasez de películas en nuestras amadas salas de cine? Es incomprensible que, con el éxito que significó en nuestro país la serie de Inuyasha, otras distribuidoras de renombre como Warner o Century Fox no hayan sido capaces aun de estrenar todas y cada una de sus películas. Es cierto que las recaudaciones de algunas películas de anime (caso el castillo vagabundo y ponyo) no hayan sido tan alentadoras.
Aunque aquí en América y mas en México el anime no nos llegaba a raudales como en la actualidad, por desgracia menos pensar anime en la pantalla de cine; “Sigue sin despertar”, limitándonos a alguna que otra producción de Pokemòn, DBZ o YU-GI-OH!. Está claro que alguien no se anime todavía a traernos de Japón lo que miles de nosotros queremos ver.
¿Qué podemos hacer al respecto? Pues tan simple como apoyar las iniciativas de aquellos que nos traen alguna cosilla ¿Cómo? Yendo al cine a verla, claro. Más de una vez si nuestro bolsillo lo permite. Solo así los empresarios se atreverán a invertir en esta área tan descuidada.
Seguramente muchos dirán, “para cuando lleguen a las principales salas de México esas películas, nosotros ya las habremos visto mil veces en la comodidad de nuestras casas, con dvd`s piratas o descargas de internet”. Esto, si bien es cierto en el caso de los otakus con mas medios, por mas bueno que fuere la piratería, no se comparará nunca con la espectacularidad de la pantalla plateada.
Son entonces dos los requisitos fundamentales: distribuidoras más osadas, y más espectadores que apoyen la iniciativa. El terreno, a nuestro humilde entender, ya esta mas que preparado para que se den ambos casos, haaa, también hagamos un pequeño esfuerzo para no conseguir anime pirata y mejor ver todo lo que nos ofrezca las cadenas de televisión, aunque sea chafòn, tal vez así se den cuenta de que el anime es algo rentable para el continente americano.